Lo primero a definir es el vestido que la novia lucirá; éste se adecuará a su gusto y tipo de reunión que realicen. Luego, habrá que resolver el peinado eligiendo uno que lo favorezca y se ajuste al estilo elegido. Por último entonces, decidirá el ramo y el tocado.
Para ello es importante saber que un ramo redondo (clásico o moderno), va muy bien con un vestido de linea romántica. Uno alargado o irregular, para un vestido lánguido. La forma del ramo no tiene que ver con la estatura de la novia, sino con la línea elegida para el vestido.
Obviamente, la novia tiene la última palabra y todo se realiza a su gusto.
Este es mi ramo de novia, lo hice todo con flores artificiales, porque lo quería conservar a través de los años. Es un ramo alargado, con rosas de color te con leche, y las flores más chiquitas, superpuse dos y las pinté con acrilicos para que tenga un tono parecido a las rosas, porque eran muy blancas.
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